El peronismo del país comienza a reponerse del duelo que lo paralizó tras los resultados electorales del año pasado. El avance del calendario hacia las elecciones que renovarán parcialmente el Congreso apura a las distintas líneas a comenzar con los movimientos para replantearse para lo que viene. En el justicialismo son tiempos de tejer, de hacer valer contactos, de desempolvar alianzas y de cobrar deudas políticas. La crisis de liderazgo, el discurso antiperonista que prendió en parte de la sociedad y las reyertas internas entre los sectores más representativos dificultan los procesos internos. En Tucumán, hay manifestaciones visibles y subterráneas de esta recomposición justicialista y esta semana se verán varias de ellas.
1-El transporte, telón de una pulseada
El capítulo de la crisis del transporte público que marcó la semana pasada fue un asunto económico -respecto de quién pone la plata para sostener un sistema agotado- que tiene de telón una pulseada política. Porque en el fondo todo es política. El reclamo del gobernador a la intendenta capitalina Rossana Chahla fue directo: pretende que aporte dinero para compensar los subsidios que ya no pone la Nación y de los que se hace cargo el Ejecutivo provincial. De acuerdo con las estimaciones de la Casa de Gobierno, la suma mensual en cuestión es de unos $900 millones (de $3.000 millones totales que destina para los urbanos e interurbanos).
El conflicto de transporte que se debió evitarJaldo decidió no intervenir como hizo en oportunidades anteriores. Enrostró que no va donde no lo invitan y que nadie lo había llamado de la Municipalidad. La tensión y el paro no aflojó hasta que la jefa municipal (estaba en un viaje oficial) se comunicó con él.
En la Casa de Gobierno leyeron esta reacción como un triunfo y consideraron que esta nueva “jaldeada” (mezcla de manifestación de poder, de picardía y de decisiones letales) salió más que bien. Sucede que Jaldo empujó a San Miguel de Tucumán a involucrarse en un tema muy complejo y, sobre todo, costoso. Afirman que Jaldo no puede seguir haciéndose cargo de problemáticas que no le corresponden y que venía advirtiendo la situación sin respuestas.
De los entornos de ambos sostienen que Jaldo y Chahla se llevan bien, pero reconocen que se miden constantemente. Ambos son protagonistas porque ocupan los espacios políticos más codiciados del distrito, tienen gestiones muy activas y son, a la vez, temperamentales. La particularidad es que, a diferencia de gestiones anteriores, los dos son del mismo signo político. Además, en las encuestas de imagen Jaldo es el que mejor mide y el que viene imponiendo la agenda pública, pero ella viene en ascenso. Este detalle no pasa inadvertido en los pasillos del poder.
En el peronismo no jaldista creen que Jaldo ve a Chahla como una potencial rival a futuro y que, con este entuerto, pretendería desfinanciar las arcas municipales para que no pueda llevar adelante obras y algunas políticas. Consideran que el gobernador le “marcó la cancha” a la intendenta. Afirman que lo mismo hizo antes con otras figuras a la que mira de reojo como el vicegobernador Miguel Acevedo o el diputado Pablo Yedlin. Aseguran que Jaldo ve a los tres como prolongaciones de su antecesor Juan Manzur. En el jaldismo desestiman que el gobernador vea a estas figuras como competidores.
En el Municipio, por su parte, consideran que las medidas del empresariado fueron extorsivas y les llamó la atención que el conflicto sólo afectara a la Ciudad, cuando los empresarios son prácticamente los mismos que también prestan el servicio interurbano. La gestión no está en condiciones de solventar subsidios de la magnitud de la que se habla, de acuerdo afirman. El equipo de trabajo de la Intendencia, de hecho, emitió un comunicado en el que sostuvo la postura de no gastar el dinero de los vecinos en ese tipo de subsidios.
¿Cómo sigue? Fuentes del Municipio consignaron que la intendenta seguramente tiene un plan y que todos esperan que su vuelta a la actividad (mañana) sea con novedades y anuncios. Trascendió que entre las medidas que podrían propiciar estaría el aumento de la proporción que paga su gestión por el boleto estudiantil; el aumento del boleto urbano (a entre $900 y $950) y alguna estrategia conjunta con la Provincia y los empresarios para la renovación de las unidades.
Mientras, en el Concejo esperan el regreso de la Intendenta, porque están a la espera de que se conteste la documentación sobre el pedido de incremento del pasaje. La comisión de Transporte podría reunirse esta semana y la que sigue podría tratarse el asunto en sesión. Aguardan que el Departamento Ejecutivo envíe también los pliegos de licitación (ingresó el de la línea 11 y se esperan otros tres más en estos días) para regularizar la situación contractual.
Con la comunicación Chahla-Jaldo, se puso en suspenso el conflicto y se levantaron las medidas de UTA (paro) y Aetat (merma de frecuencias y despidos). Lo que suceda desde mañana es aún incierto. Inclusive, no descartan un encuentro entre el gobernador y la intendenta.
2-El Consejo del PJ
La idea del jaldismo es provincializar los comicios del año que viene y comenzar, por ello, a despertar al justicialismo local. En paralelo, corre la intención de impulsar una reforma de la Constitución, con la elección de convencionales no unificadas con la de diputados.
Jaldo, que es vicepresidente del PJ local pero que conduce el movimiento, viene enfrentando cuestionamientos y chisporroteos internos por su postura en relación al Gobierno mileísta. En cada reunión, el mandatario explica sus razones y objetivos futuros para calmar -y acercar- la tropa. El tranqueño repitió una y otra vez a los suyos que la cercanía es estratégica y que no derivará en un acuerdo electoral con La Libertad Avanza (LLA), tal como teme parte del oficialismo y, sobre todo, la oposición. Jaldo armará las listas el año que viene y será con sus propias figuras, afirman en su entorno. Las dos bancas que el peronismo pone en juego son de espacio e integran el bloque Independencia El mandatario cree que el PJ tiene que revitalizarse en todo el país y dejar atrás al massismo y al kirchnerismo.
En su último discurso en el partido afirmó que no habrá grietas y lanzó dardos para varios blancos. El más deducible fue para el diputado Yedlin, que se ha posicionado como uno de los máximos opositores públicos de las políticas del Gobierno nacional, y a quien acusó de sacar un pie del plato al vincularse con el Frente Renovador. Hubo, sin embargo, otros mensajes un poco más encriptados y fueron para lo que queda del manzurismo y para el propio Manzur. Porque si bien el ex mandatario no aparece en escena, Jaldo sospecha que está al tanto de todo cuanto ocurre y que mantiene conversaciones con distintos referentes tucumanos. Todo el ambiente político sabe que, aunque ambos manifiesten que uno no molesta al otro, es una interna que siempre está latente.
Jaldo convocó a una sesión del Consejo del PJ. Los consejeros fueron citados para mañana, a las 8, en la sede del partido. El temario principal tiene que ver con el reemplazo de dos miembros: Teresa Felipe de Heredia (falleció) y Reinaldo Jiménez (renunció y trabaja en el Poder Judicial). Como rige la paridad de género, serán reemplazados por Camila Khoder y Hugo Cabral, respectivamente.
El resto fue notificado. Hasta ayer, los que habían manifestado que no podrían concurrir son Manzur (adujo compromisos en Buenos Aires) y Juan Antonio Ruiz Olivares (por cuestiones de salud). Entre los dirigentes que forman parte del órgano y que sí concurrirán están Yedlin, Carolina Vargas Aignasse, Elia Fernández, Regino Amado,Gladys Medina, Fernando Juri, Stella Maris Córdoba y Armando Cortalezzi, entre otros. Está previsto que llamen al Congreso para el 19, en Monte Bello.
La gran duda que ronda entre los “compañeros” es cómo será el armado para el 2025 ¿El PJ local replicará el frente nacional? ¿Cómo se plantará el PJ nacional frente a Jaldo por su cercanía con la Rosada? ¿Seguirá Jaldo en sintonía con la Nación? ¿Habrá dos listas, una jaldista y otra del peronismo no jaldista? ¿Podrá acordarse la unidad? Las conversaciones al respecto recién comienzan.
A propósito, se esperan otros movimientos internos. En los próximos días se presentará una agrupación que pretende comenzar a trabajar con la vista puesta en las próximas presidenciales y para impulsar al gobernador bonaerense Axel Kicillof. Esa línea, promovida por el ex legislador Jesús Salim, se llamará “Renacer peronista” y pretende ser uno de los espacios que convoque a las líneas del camporismo, kirchnerismo y otras del progresismo. Si bien no tienen en sus planes confrontar con el gobernador, sí quieren un peronismo opositor a la Nación.
Está previsto que Jaldo también esté en un asunto nacional. Viajará esta semana para participar el martes de uno de los hechos políticos que involucra a los gobernadores. Los mandatarios se reunirán para elegir al director del Consejo Federal de Inversiones (CFI), que implica una caja millonaria. La rosca está en su punto más álgido. Es un puesto de interés para los mandatarios porque el CFI financia proyectos y obras en todo el territorio. Se definirá si continúa el peronista Ignacio Lamothe, cercano a Wado de Pedro, o si es reemplazado. Los gobernadores de JxC vienen proponiendo para ese lugar a Sebastián García de Luca.
3.¿Quintela en Tucumán?
La médula de la discusión en el justicialismo nacional pasa por cómo se reorganizará el partido a partir de las internas del 17 de noviembre.
Habría un principio de acuerdo para que el gobernador riojano Ricardo Quintela sea quien encabece el movimiento en la antesala electoral. Quintela cuenta con un apoyo clave: el de Kicillof, quien gobierna el distrito electoral más grande del país.
La interna bonaerense entre Kicillof y La Cámpora viene marcando el ritmo de las negociaciones. Kicillof quiere imponer su postulante, pero no querría ponerse a la cabeza de la estructura porque tiene en su horizonte la presidencia. De hecho, dirigentes de todas las provincias peregrinan a La Plata en busca de contención y con la idea de comenzar a construir el espacio en todo el territorio.
En ese contexto, varios grupos invitaron a Quintela a Tucumán y su viaje podría concretarse pronto. Si bien los contactos locales analizan postergarlo, fuentes cercanas al gobernador riojano informaron que tiene marcado en la agenda una visita para el 20 de este mes. De hecho, este fin de semana una comitiva de dirigentes peronistas de trayectoria viajó a La Rioja para charlar con él. También podrían venir en los próximos meses el propio gobernador bonaerense o su funcionario y armador Andrés Larroque.
¿Y Manzur? En cercanías del senador comentan que mantiene su intención de formar parte de la próxima mesa. Si bien concurrió a la jura de la nueva Constitución riojana, el tucumano no olvidaría que “El Gitano” habría formado parte de un grupo de dirigentes provinciales que le jugaron en contra cuando lanzó su fallida fórmula presidencial con de Pedro.
Estos y otros hechos harán que esta sea probablemente una semana peronista en la que resonarán los ecos de la puja Jaldo-Chahla, las definiciones el Consejo del PJ y la posibilidad de que Quintela esté en Tucumán